Una botella de Jack Daniels (black label) reposa sobre la fina madera de los muebles de estilo colonial en su departamento de la avenida Alvear. Jaime Durán Barba no para de hablar por teléfono. El gurú ecuatoriano de Mauricio Macri está trabajando para definir el lanzamiento del jefe de Gobierno porteño. “Yo creo que debería ser candidato a presidente”, remarca en diálogo con Página/12. “Francisco es un peregrino de la política que ha ido de un lado a otro y uno no sabe dónde termina”, dice sobre De Narváez.
–Como ecuatoriano, ¿qué opina de las declaraciones de Macri sobre la “inmigración descontrolada”?
–Fue una frase desafortunada en un contexto equivocado. Si Macri fuese xenófobo, no trabajaría con él de ninguna manera. A la mayoría de la gente civilizada la xenofobia le parece una aberración. Yo no me siento ecuatoriano sino latinoamericano.
–¿Qué le aconseja a Macri: reelección o candidatura a presidente?
–La muerte del presidente Kirchner desarmó el panorama político. Y hay que esperar a que se rearme. En el peronismo conviven dos tendencias: una de izquierda, representada por gente que viene de la Tendencia y de La Cámpora, y otra bien de derecha. Moyano no creo que sea un hombre de izquierda. Los gobernadores y los intendentes son muy de derecha, muy locales. Hay una contradicción compleja que no sé si la logran resolver.
–¿La decisión de Macri, entonces, depende del peronismo?
–De cómo se articula el peronismo oficial, desde luego. Macri tiene mucho entusiasmo y mucha vocación por la candidatura presidencial. Yo también creo que debería ser candidato a presidente, pero él decidirá en marzo. Y lo que él resuelva, pues resolverá. Los asesores sólo asesoramos.
–¿Está claro que tiene que competir en la elección nacional?
–Ahorita no está claro nada, aunque me gusta la opción presidencial.
–¿Qué perfil tendría que tener el vice de Macri?
–Tendría que ser alguien que complemente la imagen de Macri. Que cumpla el rol de Gabriela, que dé sensibilidad, que humanice, un toque más de populismo. De estilo peronista, probablemente que sea del interior.
–¿Quién podría ser?
–No tenemos a nadie en mente. Dependerá de quiénes apoyan, quiénes se unan a la campaña.
–Fuera de Macri, ¿cuál es el mejor candidato para reelegir en Capital?
–Gabriela tiene muchos méritos, es una buena candidata, personalmente me gustan mucho las candidatas mujeres. Horacio tiene también sus méritos. Serán ellos los que resuelvan, yo no me meto mucho en las cuitas internas.
–¿Qué dicen las encuestas?
–Hay encuestas que dicen que está mejor Gabriela y otras que dicen que está mejor Horacio…
–Michetti dice que le saca 20 puntos a Larreta.
–Y tal vez Horacio dirá lo mismo.
–¿Macri se tendría que volver a aliar con De Narváez?
–En 2009 estaba claro que tenía una alianza. De Narváez fue candidato de lo que llamaron Unión-PRO. Después se fue no sé a dónde… Francisco es un peregrino de la política que ha ido de un lado a otro y uno no sabe dónde termina. Expresó que podía ir con los radicales, después se acercó al Frente para la Victoria, en otro momento a Reutemann…
–¿Y Solá?
–¿Está en algún lado? No lo he visto… (se ríe).
–¿Jorge Macri es un candidato sólido en la provincia?
–Ha hecho un trabajo importante. Antes hablaban de él en son de broma, ahora le dan algún espacio. Es joven, distinto… veamos a dónde va.
–¿A Macri lo beneficiaría una alianza con Duhalde?
–Duhalde tiene su nicho del 5 o 6 por ciento. Es difícil que crezca, por los elementos negativos de su imagen. Si se arma una alianza entre distintos grupos y él apoya a Macri, pienso que sería posible. Lo que no sería lógico es que Macri adhiera al Peronismo Federal y vaya a internas. No sé si Das Neves sigue siendo federal o ya se hizo unitario. Ahora, si hay peronistas, radicales y comunistas que respaldan a Macri…
–Comunistas, por ahora, no hay…
–Ya conseguiremos alguno.
–¿Duhalde no contaminaría la imagen de nueva política?
–Sí, hay un tema importante ahí de choque de imágenes. Como imagen, no le es un gran negocio unirse a otras que son antiguas. Esto le pasó un poco a De Narváez: tuvo una gran imagen cuando terminó la elección, pensaba que podía ser presidente. Objetivamente, hoy no tiene ni la mitad de la fuerza que tenía hace un año.
–Si el candidato de la UCR es Ernesto Sanz, ¿cambia la estrategia?
–Sanz sería un candidato muy compatible con el electorado del PRO, eso es real. Me parece un tipo inteligente, capaz. Sería un buen candidato que podría competir con nuestro electorado.
–Si Cristina sigue midiendo como hasta ahora, ¿conviene presentarse igual o es mejor reelegir y esperar a 2015?
–Posicionarse como referente de la oposición es ocupar el sitio que ocupó Lilita en 2003 o Lavagna en 2007. Carrió en 2003, con su enorme cruz, representaba lo distinto. Después perdió totalmente la credibilidad. No tiene mucho sentido. Hay que jugar si hay sensatas posibilidades de ganar.
–¿Boudou es un buen adversario?
–Boudou no es muy conocido y tiene una relación de negativas sobre positivas muy alta entre los pocos que lo conocen. Filmus es el candidato que mejores números tiene. Ahí tienen un buen candidato. Tengo un buen concepto de él, porque ambos hemos sido directores de Flacso.
–¿Por qué cree que lo candidatean a Boudou, entonces?
–No lo entiendo.
El arte de ganar
–¿Va a presentar su libro durante la campaña?
–Puede ser en marzo. Estoy muy contento, estamos vendiendo como locos. Es el texto central para un posgrado de asesoría política que iniciamos en Washington. Me hace mucha gracia que los que han opinado sobre el libro se quedaron en las hojas y no han visto el bosque. Han criticado los ejemplos y no el contenido de libro. En México escribieron como locos sobre López Obrador, acá sobre los argentinos.
–Sin embargo, ningún político argentino lo cuestionó.
–La mayor parte de los políticos lee muy poco, desventuradamente.
–¿Por qué dice en su libro que “los que expresan interés con los desaparecidos no vacilan en atropellar derechos y humillar a huérfanos que fueron adoptados”?
–Porque creo que los derechos deben ser para todos y no creo que se deba atropellar los derechos de nadie. Me caen muy mal los que tuvieron que ver con el proceso militar. Pero tienen derecho a defenderse.
–¿Piensa que las Madres quieren “linchar sin juicio” a los represores?
–No creo que ese juicio que hicieron en la Plaza de Mayo diera mucha defensa a nadie.
–Se trataba de un juicio simbólico.
–No creo en los linchamientos, ni siquiera simbólicos.
Test del veraneante
–¿Cuántos caballos tiene en su estancia en Ecuador?
–No, es un criadero pequeño: tengo unos diez caballos. Sí, son raza completamente pura. Y me gusta ir con ellos a la montaña.
–¿A qué político elegiría para irse de vacaciones?
–Jaime Nebot (alcalde de Guayaquil), por el sentido del humor descontrolado que tiene. Nunca me iría con un político aburrido, es decir… ¡con casi ningún otro!
–¿Una bebida para el verano?
–Jugo de nopal mexicano. El nopal es la hoja de un cactus que produce la tuna. Es muy rico, muy fresco y saludable. Me encanta.
–¿Un piropo?
–No, soy malísimo para eso. Nunca en mi vida pisé una discoteca.
–¿Un libro?
–Estoy volviendo a leer Metafísica de los tubos, de Amélie Nothomb. Y un libro de historia mexicano: Del mito de los aztecas al mito de la independencia. Me ha hecho llorar de la risa.
–¿Qué condimento le pone al pancho?
–Mucha mostaza. Mayonesa, también. No le pongo ketchup.
Fuente: Página 12