Por Alexis Medina
Cuando quise entender cual es el uso político que se puede hacer de twitter, y como cada vez que busco información referida a la aplicación de las Tics en política todos los caminos conducen a Obama, así encontré una presentación que realizo Eduardo Betas, Director de Diario de Gestión, donde destaca aspectos importantes en el uso de Twitter en Política: ¿Qué pasaría si los legisladores utilizaran un sistema como el twitter para publicar opiniones, comentarios o preguntas en internet mientras están en sesión?.
¿Qué sucedería si los diputados y senadores publicaran a través de internet y en tiempo real pequeños mensajes de texto donde describen qué piensan y sienten cuando están en sesión? ¿Qué sucedería si los ciudadanos, con acceso a la red, pudieran leer, también casi en el mismo momento en que se producen, esos mensajes? ¿Es eso posible, desde el punto de vista tecnológico?
Si. A través de servicios de emisión de mensajes cortos que pueden transmitirse desde celulares o a través de internet. Estos textos se publican de inmediato en un terminal móvil o en una computadora conectada a la red. El más conocido de estos servicios es Twitter.
También llamados microblog, Twitter facilita, tanto al emisor como a cualquiera que quiera hacerlo, el mostrar esos textos en su propio sitio web o blog. Y todo esto gratis o al costo del mensaje de los celulares o de la conexión a la red.
Ahora, bien… ¿Utilizaría un legislador esta herramienta para que su gestión sea más dinámica, además de ser más transparente? Ahí la respuesta se empieza a complicar.
Una de las complicaciones es que la tendencia, por ahora sólo internacional, marca que muchos dirigentes políticos hacen uso de estos instrumentos de comunicación sólo cuando están en campaña electoral.
Como en Estados Unidos donde la mayoría de los postulantes presidenciales usan twitter. El más reconocido y pionero es el demócrata John Edwards. Aunque no se queda atrás su compañero de partido, Barak Obama, que ya reclutó 3.300 seguidores de sus pasos por la red. ¿Lo seguirán utilizando en el caso de ser electos como mandatarios?
El twitter, como los blogs, no puede ser equiparable a los spots televisivos que inundan la TV en tiempos de campaña. Porque estos dispositivos pueden –y deben- ser extensiones de la palabra y la acción del político cuando éste ya fue electo por la ciudadanía.
Porque si antes un legislador no tenía tiempo material para hablar con cada uno de los ciudadanos o le era imposible comentarle en tiempo real lo que pensaba durante la sesión, hoy estos artefactos digitales permiten otro tipo de acercamiento.
¿Lo utilizarán los legisladores? Si me remito a la experiencia de un año y medio de Diario de Gestión, el espacio que brinda blogs gratuitos a los legisladores de todo el país, puedo decir que en un futuro no muy lejano, sí, es posible. Aunque no es ni va a ser fácil.
En principio, porque la mayoría de los dirigentes políticos aún piensan como lo hacían en la era analógica, es decir, la era anterior a la era digital que hoy vivimos.
En aquellos tiempos analógicos prevalecía la difusión por sobre la comunicación y la expresión política por excelencia era el discurso y no el diálogo. Estas formas de pensar impusieron maneras propias de mostrar en internet al parlamento. De ahí es que los sitios web del Congreso Nacional, por ejemplo, se caractericen por tener una estructura cerrada donde el único canal de diálogo con el ciudadano sea una casilla de correo electrónico que, por lo general, no sabe ni contesta.
Y de ahí también, que estos mismos portales terminen siendo una proyección de los edificios físicos que albergan al Poder Legislativo. Construcciones adustas, crípticas, sobrecargadas de símbolos honoríficos, con paredes espesas, alfombras que apagan los pasos y puertas inmensas y casi siempre cerradas.
Hoy todo está empapado en internet. Y nadie, si al menos tiene la cabeza puesta en este siglo, puede decir que la red es sólo para unos pocos. Porque la web dejó de ser el territorio comanche de los informáticos puros para poblarse tanto de nativos digitales como de inmigrantes de la vieja era.
Por eso, más que nunca, es necesario que los políticos, sea cual fuere su ideología y su edad, tomen en sus manos estas herramientas tecnológicas –blogs, twitter- para abrir con ellas espacios de comunicación –de ida y vuelta- con la ciudadanía. No sólo porque pueden hacerlo sino porque deben hacerlo.
Porque es hora de que la web oficial del Congreso incorpore un sistema de blogs para sus integrantes. Y que ellos hagan de estos blogs una vía de acceso a su despacho de ideas, proyectos, opiniones. Donde el ciudadano pueda ingresar y visitar lo que piensa cada legislador o legisladora y, al mismo tiempo, dejarle su sugerencia, su idea, su necesidad…
Que hagan del twitter, la posibilidad de sentar al lado de su banca, en sentido figurado, a todos los ciudadanos interesados en un debate. De poder comentarles cómo va la discusión, qué piensa decir, qué piensa votar. Y ¿por qué no? Al mismo tiempo, saber qué opina tal o cual de lo que él dice.
Porque esto no sólo serviría para la comunicación instantánea sino también para producir un nuevo documento que registre la memoria de las decisiones legislativas.
¿Qué sucedería, entonces, si los diputados y senadores comenzaran a utilizar twitter para publicar en internet en tiempo real lo que les pasa por la cabeza mientras están en sesión? La ciudadanía sabría ya no sólo lo que hacen con el voto que le dieron a su representante. Sino que empezarían a saber, de un modo más directo, la voz en la que delegaron su propia voz.
Fuente: Enlace Digital