Por: Paw Ortiz Moreno
Investigar a la oposición es algo que hay que hacer si quieres ganar una contienda electoral. Cómo debe hacerse y para qué sirve?. El consultor norteamericano, John Balduzzi, presidente de Balduzzi Group, Balduzzi quien habló en el segundo POLI Conference realizado en la ciudad de New York afirma que una investigación de este tipo, planteada correctamente, abarca tres grandes aspectos, en lo que refiere al propio candidato.
En primer lugar, una biografía completa del adversario en la cual, se deben tener en cuenta los títulos universitarios, los trabajos en los que se ha desempeñado (compañías, firmas de abogados, o anteriores cargos públicos), la experiencia profesional, sus debilidades y fortalezas.
En segundo lugar, se investiga la parte financiera de su campaña, de dónde viene el dinero, y quién paga o aporta en ella; además de los negocios, sociedades e inversiones del candidato opositor, para conocer el manejo, el objetivo, y sus fuentes de financiación.
En tercer lugar, se investigan los antecedentes en términos jurídicos, si ha sido demandado o acusado, o ha participado directa o indirectamente en algún proceso judicial. Una buena investigación en este sentido, también contempla, según Balduzzi, los miembros del equipo de trabajo del opositor, en los mismos aspectos antes mencionados.
Balduzzi, considera que existen muchas fuentes de información válidas y que éstas están a disposición no solo de los consultores, sino de los ciudadanos. Para el ponente, las redes sociales son fuentes de información primaria, y en este tiempo, han significado una trampa para muchos candidatos.
En palabras del expositor, el candidato no debe enterarse de la información que revele la investigación, o al menos hasta que esta se verifique y se determine el tiempo en que debe usarse, debido a que se corre el riesgo de que al conocerla, el candidato la use prematuramente en un debate o una entrevista con medios de comunicación, y ésta pierde su objetivo (favorecer nuestra campaña y perjudicar la del candidato opositor) y el impacto. El momento para revelar la información o “bala de plata”, como el mismo la ha llamado, que terminará la campaña del opositor, así como la forma de hacerlo son factores muy importantes. Puede el candidato hacerlo directamente desde su propia campaña, o hacerlo a través de los medios de comunicación, sin comprometer su nombre o el del partido.
El plan de acción, para dar a conocer la información tiene tres etapas, de acuerdo al ponente. La primera, es una burla del candidato, una etapa graciosa, a través de la cual se pretende crear duda o generar conciencia acerca de la situación (o situaciones) que se revelaron en la investigación. La segunda etapa, se plantea “algo negativo”, que relaciona directamente al candidato opositor con la información de la investigación. Y la tercera etapa, o “algo totalmente negativo”, hace énfasis en la información ya revelada, y desacredita al candidato opositor, destruyendo los argumentos de su campaña.
Dentro de las preguntas de los asistentes, se planteó, el caso contrario, es decir, que nuestro candidato fuera atracado por una campaña negativa. Balduzzi afirma que la mejor manera de evitar enfrentarse con esta situación, es el conocimiento del candidato con quien se va a trabajar, y preparar una respuesta bien estructurada. En cuanto a las bondades de las campañas negativas, el exponente afirma que las campañas de este tipo, tienen alguna influencia sobre el electorado, pero hay factores que determinan la eficacia de estas, tales como la cultura e idiosincrasia de la comunidad a la que va dirigida, y al objetivo de nuestra campaña, y que es mejor “detener a la oposición antes de que esta sea capaz de detener nuestra campaña”.