Por: Israel Rojano
El Marketing Político desde su origen ha venido acompañado de publicidad y tal pareciese que con el tiempo esta publicidad aumenta, pero curiosamente y más en el caso de nuestro país, en lugar de que el oficio del político recupere certidumbre y credibilidad; esta se va perdiendo más y más, tomando una peor imagen pues indudablemente la gente quiere ver resultados, quieren ver personas y no solo papeles.
He aquí el meollo del asunto, mucho políticos dejando de lado, lo que para mí es lo más importante. “Las Relaciones Publicas” y estas desde siempre e indudablemente han venido acompañadas de estrategias de marketing, la publicidad, y comunicación con la prensa.
Sin bien las Relaciones Públicas en el principio fueron utilizadas y proyectadas en su mayoría por el sector privado, para conseguir una buena imagen y reconocimiento social ante sus clientes, en los últimos años esta disciplina ha sido aprovechada en la política dentro de lo que se conoce como el Marketing Político.
Paradójicamente y ante lo que pudieran pensar muchos, América Latina; especialmente países como Nicaragua, Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú Y Brasil. Han sido punta de lanza en las nuevas formas de crear política, en las nuevas formas de crear Marketing Político.
Y esto por supuesto Incluye la incurso de una forma muy efectiva de las relaciones publicas, pues si bien la prensa y otros medios de comunicación son efectivos para comunicar tu gestión y labores legislativas, siempre será necesario el contacto social y cercano a la gente; esto anudado a que los ciudadanos real mente vea las promesas de la campaña convertidas en verdaderas políticas de estado u en su caso obras tangibles.
Si bien el deseo de todo Partido y Político es conseguir ganar un cargo Público, o en su caso mantenerse en el poder, por vía electoral y democrática, necesitan aprender a utilizar las relaciones públicas.
Hoy por hoy lo pesa más en la política es la credibilidad que debes tener como un buen Aspirante a forma parte de clase política del siglo XXl; el siglo de las relaciones publicas en el marketing político.
Fuente: Todo Marketing