Por: Andrés Elías
Durante enero y febrero de este año, me dediqué a probar cada una de las hipótesis que escribí en mi libro Marketing Político 3.0. Durante el experimento que me llevo dos meses pude darme cuenta que cada una de mis hipótesis que descansaban sobre una base teórica se iban ejecutando también en la práctica.
Les comparto el fruto de mis hallazgos:
- Conversa, dialoga, interactúa con tu comunidad
La dopamina es una sustancia que segrega nuestro cerebro. Cuándo interactúas con alguien en redes sociales estás provocando en el otro los mismo efectos que provoca el alcohol en los bebedores o el juego en los apostadores. La dopamina está vinculada a la recompensa, interactuar con alguien genera en el otro un liberación de esta sustancia. La neurociencia tiene mucho que enseñar al marketing digital, una de las cosas que tenemos que aprender rápidamente es cómo las emociones obran en la mente humana, y cómo podemos alinear nuestros mensajes en torno de ellas.
- Las grandes cuentas interaccionan menos.
Mientras buscaba cuentas de políticos con los cuales pensaba que podía tener interacción, hallé con unas cuántas que observaba que hacían retuit de otras cuentas. En pocos casos encontré cuentas de políticos que conversaran con su público. Me decidí a probarlo. Escribí durante varios días a cuentas de diferentes políticos y el resultado comprobó mi hipótesis: “Los políticos manejan comunicación unidireccional en redes sociales”.
- Los seguidores no saben conversar o darle continuidad a la conversación
Mientras hacía mi experimento pude darme cuenta que cuándo interactuaba con mis seguidores y me limitaba afirmar, mataba la conversación. Con el tiempo aprendí a darle continuidad a las conversaciones. Es importante hacerlo porque mientras más larga se vuelve el intercambio, más exposición tienes y posibilidades de ganar nuevos seguidores y te forjarás la fama de ser un buen conversador.
- Provoca a tus seguidores
Hay muchas formas de hacerlo y funciona como en la vida real. Me dediqué hablar de fútbol, política, cine, música, pero si hay un tema que apasiona en redes sociales son ciertos clivajes aborto/provida, católico/ateo, capitalismo/socialismo. Generalmente provoca reacciones sobredimensionadas y por ello desaconsejo tratar estos temas, con excepción si quieres posicionarte y que las personas conozcan lo que piensas sobre determinadas cosas.
Pero también hay formas de provocar que no están relacionadas a temas sensibles. Puedes hacer encuestas, hacer una observación inteligente, mostrar una imagen interesante. Puedes provocar haciendo que tu contenido haga reír, llorar o sorprender.
- Conversa pero síguelos
Esta es la regla de oro del Marketing Político 3.0. Conversa con tus seguidores pero síguelos de vuelta. Cada interacción que tienes te acerca a crear una comunidad. Las redes sociales afectan al cerebro al igual que un beso. Cada vez que tienes contacto con algún seguidor estás estrechando un mano, besando un niño o plantando un árbol. Si los sigues de vuelta, harás que tus seguidores descarguen una buena carga de dopamina según un estudio de RadiumOne, el uso de los medios sociales es una mina de oro para la dopamina, ya que “cada vez que publicamos un post, compartimos un estado, damos un ‘like’, dejamos un comentario o enviamos una invitación en línea estamos creando una expectativa, generamos un sentido de pertenencia y reforzamos nuestro autoconcepto a través de compartir”.
- La gente espera opiniones
Cuando das tu opinión con respecto a algo – ya sea un video divertido, un artículo de la prensa- has hecho propio dicho contenido y, por lo tanto, tiendes a vincular tu marca personal con conceptos abstractos que la gente relaciona fácilmente.
Cuando das una opinión estás haciéndoles pensar que detrás de la cuenta no existe una conexión automatizada sino que hay alguien que está pensando y escribiendo. Las opiniones que reafirmes deben de validar el punto de vista de tu comunidad, Trump lo hace todo el tiempo. No temas en expresarte. Hay más peligro en decepcionar a un seguidor tuyo que no encajar con otras personas que nunca te votarán.
- La gente quiere saber tu posición
Twitter está lleno de un público que quiere permanecer activo en las conversaciones. Si Instagram es para un público morboso, Twitter es para un público chismoso. Dicho de esta manera, debes de tomar posiciones sobre temas y expresarlas libremente. No temas el ataque de bots y trolls. Lo mejor que puedes hacer es ignorarlos pero verás que si tu comentario está bien redactado y compartible mucha gente te apoyará y reforzarás tu comunidad con gente que tenga tus opiniones.
- Debes conocer a tu público
Mi público está compuesto en su mayoría por gente de afiliación católica, esto descubrí cuando intencionalmente postee sobre cine, política y religión al mismo tiempo y recibí muchísima atención en el contenido sobre un libro espiritual que recomendaba leer.
Conocer a tu público te puede ayudar a mejorar en términos de marca personal, puedes sacar insights con facilidad y conectar mejor con tu público. Las mismas áreas del cerebro que se activan por la comida se activan con los estímulos sociales. Por ello, si escribes de lo que tu público ama y conoce estarás generando una recompensa en su cerebro.
Fuente: Blog de Andrés Elías