Por: Felo Jiménez
Durante mucho tiempo ha existido un fantasma en los sistemas democráticos del mundo, varían los porcentajes de un país a otro o de una elección a otra, y es una constante en los gobiernos democráticos trabajar generando políticas (hasta ahora insuficientes), para que disminuya, estamos hablando de la abstención electoral.
Pero por qué existe la abstención y qué se puede hacer para disminuirla?
Existen muchos factores que logran generar abstencionismo en la población, y existen diversos tipos de abstencionistas. Dentro de los factores generadores de abstencionismo quiero mencionar uno que en lo personal me parece es muy relevante, y es la poca comunicación institucional en periodos no electorales, donde se construya paulatinamente conciencia ciudadana sobre la importancia de la participación en todos los asuntos públicos del país, utilizando las herramientas legales y democráticas existentes, incluyendo el voto entre ellas, ya que es un error esperar solo la fecha de las elecciones para pretender bombardear a una población en que ejerza su voto, además que vote por un candidato u otro, y para colmo que también asimilen las propuestas de cada uno de los candidatos y partidos políticos con spot electorales, vallas, pendones, trípticos, dípticos, propagandas por radio, por televisión, redes sociales, etc, es decir, con todos los elementos propios que conforman las campañas electorales en cualquier país, región o ciudad. Creo firmemente en que si los gobiernos mantienen una comunicación institucional inclusiva y bien diseñada para instaurar conciencia, promoviendo en todo momento el interés colectivo por los asuntos públicos, seguramente aumentaran los índices de participación para futuros procesos electorales en los países donde se aplique esta metodología.
La abstención no tiene un comportamiento lineal en todos los países ni en todas las regiones, y esto obedece a que existen diversos tipos de abstencionistas que logran impactar en los porcentajes de participación electoral a nivel mundial, entre ellos coexisten: los abstencionistas a los que nunca les ha interesado en lo mas mínimo ejercer su derecho al voto, los abstencionistas que creen estar dando una lección o castigo al partido político de su histórica preferencia, los abstencionistas convencidos en que no harán la diferencia con su participación, los abstencionistas defraudados con los sistemas de gobierno sin importar el partido de turno, y también existe un particular tipo de abstencionista al que tenemos que estudiar con atención ya que estas personas empezaron a mutar de participantes a abstencionistas con la indecisión primero de por quien votar; luego con la disyuntiva de ir o no a votar, y luego es que toman la decisión de no votar en ningún otro proceso electoral, todo esto se origina al no existir una comunicación política lo suficientemente clara o convincente que respondiera sus preguntas o llenara sus expectativas. Pero esto no termina acá, ya que vemos muy desafortunadamente algunos gobiernos que promueven la abstención, y lo hacen gracias a los resultados de sus cálculos políticos, contando con sus maquinarias partidistas, sacando provecho a la falta de participación, logrando por esta vía hacerse con la victoria en la contienda electoral minando con esta conducta la esencia misma de la democracia.
No nos engañemos, la abstención siempre existirá, algunos defenderán las tesis abstencionistas como métodos de protesta, rebelión o castigo y otros defenderemos la participación electoral como formula ciudadana de voz y decisión para nuestros destinos no permitiendo que otros decidan por nosotros, pero aunque la abstención no va a desaparecer totalmente, si se puede minimizar convenciendo a los ciudadanos de las ventajas y bondades de una democracia solida, participativa, de respeto, contando con el gran aval del respaldo y compromiso de una mayoría comprometida activamente con su país.
El marketing político no solo es para que un candidato gane elecciones, nada mas lejano a la realidad!, también tiene la bondad de poder utilizarse por los gobiernos, debido a que contiene una gran variedad de técnicas y dentro de ellas se encuentra la comunicación institucional, que al utilizarla eficientemente y hoy mas que nunca aprovechando las ventajas de los avances tecnológicos, llegando a mas personas en menos tiempo y con mayor asertividad, puede sin duda alguna coadyuvar a disminuir los porcentajes de abstención, fortaleciendo de esta manera los sistemas democráticos en las naciones.
No quiero finalizar este artículo sin antes dejar a mis amigos lectores una cita de Platón: “El precio de desentenderse de la política es el ser gobernado por los peores hombres”
Un asesor de marketing político no deja nada al azar y todo responde a una estrategia.