Por: Maira Pereira

Michelle Obama además de ser la esposa de Barack Obama, uno de los Presidentes más queridos alrededor del mundo, es también una estrella que ha brillado con luz propia ganándose el corazón de muchos.

Casada con Barack Obama desde 1992, esta abogada graduada en 1982 por la Universidad de Princeton es en parte artífice el éxito de su esposo. Honesta, directa y natural, sus discursos han tenido casi tanto impacto como los de su esposo. Y no es sólo lo que dice si no cómo lo dice: con fuerza, como si hubiera escrito cada palabra (tanto ella como su marido tienen a especialistas que escriben sus discursos).

Continuando con la serie de “10 claves para alcanzar el éxito, según…”, en Miss Política nos parece oportuno darle un espacio más que merecido a Michelle Obamapor su trascendencia como la Primera Dama número 44 de los Estados Unidos.

Y es que la verdad, Michelle Obama, es un ejemplo de vida para muchas mujeres que quieren convertirse en empresarias, políticas, científicas, atletas. Es una mujer que pisa fuerte y deja huella en cada lugar en que se encuentra y aquí explicamos las claves de su éxito en sus propias palabras.

10 claves para alcanzar el éxito, según Michelle Obama

1. Tienes que practicar quién quieres ser.

Tú no te levantas una mañana y repentinamente te encuentras con él o la persona que quieres ser. Tendrás que poner mucha energía para ser quien quieres ser.

Si quieres ser una persona honesta, entonces tienes que ser una persona honesta, aunque empieces a las 3 a las 4 ó a las 5.

Si quieres ser una persona que trabaje duro, deberás entender que el trabajo duro no aparecerá de la nada; tú tienes que practicar el trabajo duro, tienes que practicar el esfuerzo.

Me gusta comentar que las buenas cosas no llegan fácilmente, y allí es donde creces.

Los mejores momentos de mi vida los he alcanzado cuando he trabajado duro, cuando he superado un miedo, y de eso no te das cuenta cuando lo estás haciendo; pero cuando sales y llegas al otro lado, dices “Wow”, realmente me he superado.

2. Lee y escribe, y conviértelo en un hábito.

Nosotros inculcamos a nuestras hijas que amen la lectura, y que también se impongan retos con lo que leen, y que no solo lean temas de chismes, les inculcamos que se auto-empujen a ir más allá, que alcancen retos que normalmente no se impondrían.

Yo a todos los aliento a leer, leer y seguir leyendo, y a escribir también.

Escribe borradores. El primer borrador no significa nada si no está bien hecho, has 7 ó 10 borradores, eso no es nada, eso no significa ningún fracaso ni que no le gustes al profesor, aunque todo esté marcado con rojo.

Cuando tú te estás convirtiendo en un mejor escritor tú mismo marcarás en rojo tus propios borradores, y así reescribes, y reescribes, así es la escritura, así vas logrando esas habilidades, y te sentirás más seguro, y podrás articular cualquier idea.

Así, podrás pararte derecho y mirar a cualquier persona a los ojos, y podrás decirle, -“Este soy Yo y es un placer conocerle”, así enseñamos en los programas de mentoría a las jóvenes.

3. Dale prioridad a tu tiempo.

Si yo tuviera que protegerlos (a mi familia), primero me protegería a mí y a mi tiempo.

Yo ya sabía que al asumir este rol (de Primera dama) no desperdiciaría ningún minuto de mi tiempo. Porque cada momento que gastaba lejos de mis hijas, para mi era un enorme desperdicio.

Todo esto lo asumí antes de ser Primera dama, incluso cuando era abogada, o vicepresidenta de un hospital, y es que una de las cosas que me di cuenta era que:

Si no tienes ningún control sobre tu tiempo y tu vida, otras personas se lo tragarán.

Si no te das prioridad, empezarás a dejar caer los pendientes de tu lista y tus hijos caerán en los niveles de prioridad que tienes en esa lista.

4. Vive y vive en voz alta.

Nosotras, como mujeres, como minoridad, nos subestimamos, y eso no debería ser así.

Yo por ejemplo pienso: Soy muy inteligente, trabajo muy duro. Yo soy muy buena en lo que hago. Tengo buenos instintos y buenas ideas, y puedo ser Ejecutiva.

Y lo digo en alto, porque nosotras, como mujeres, no nos gusta darnos palmaditas en la espalda, y nos hacemos a un lado unas a otras.

En ocasiones aplazamos nuestra vida, y cedemos nuestro poder con mucha facilidad.

Me gusta decirles a todas las chicas, estén donde estén, que vivan en voz alta, y que entiendan que lo que tienen en su mente es realmente útil, no lo oculten, no lo boten, y tampoco pidan disculpas por ello, solo pónganlo sobre la mesa, y dejen que la gente lo descubra, porque nos silenciamos a nosotras mismas.

5. Fracasa para alcanzar el éxito.

Todos los días les digo a mis hijas:

No tengan miedo de fracasar, eso es lo que usualmente nos detiene tanto a las jóvenes como a las mujeres, porque pensamos que debemos tener razón, que debemos estar en lo correcto, que debemos ser perfectas, y también pensamos que no podemos tropezarnos.

La única forma en que puedes ser exitoso o exitosa en la vida, y la única forma en que puedes aprender es fracasando.

Y no se trata del fracaso en sí mismo, tiene que ver con lo que haces después de fracasar.

6. Busca la excelencia.

Cuando ellos bajan yo voy por alto”, esa es la elección que Barack y Yo (Michelle Obama) hemos hecho, esto es lo que nos ha mantenido con sensatez a lo largo de los años.

Nosotros simplemente no le otorgamos ningún espacio en nuestro corazón, mentes o almas a la oscuridad, y en su lugar, escogemos la fe, la fe en nosotros y en el trabajo duro, fe en nuestro dios que nos abruma con ese amor que nos sostiene cada día,

Eso es lo que hemos escogido, hemos escogido el amor, el amor por nuestra hijas, nuestro compromiso para dejarles un mundo mejor.

Y, por encima de la oscuridad y de la negatividad, escogimos la Excelencia. Fuera de todo ese ruido escogemos un tono, y nos esmeramos por ser excelentes en todo lo que hacemos.

No nos vamos por el camino fácil ni por los atajos. No nos quejamos, una y otra vez damos el 120 %.

7. Ayuda a los demás.

Apóyense los unos con los otros. Nunca me cansaré de decir esto, nosotros (como matrimonio) tenemos que ser nuestros mejores amigos, esto significa que no podemos ser maliciosos, que no podemos competir viendo el fracaso del otro como si fuera nuestro propio éxito.

Todos podemos levantarnos juntos, todos podemos ganar.

Una creencia medio extraña en nuestra sociedad es que (nosotros como pareja) tenemos que competir, y uno se tiene que hacer a un lado o hacia atrás para que el otro triunfe, y eso no es cierto, nosotros nos necesitamos el uno al otro. 

8. Cree y confía en ti mismo.

Algunas personas me dijeron que no iba a ser posible desempeñarme bien en la escuela.

Sea como sea, Yo siempre fui una buena estudiante, y trabajaba duro, pensaba que alguna magia sucedía, y no me daba cuenta de que todo era solo el resultado del trabajo duro.

Te aseguro que tuve muchos periodos de dudas, y hoy todavía las tengo, las dudas nunca se van, solo aprendes cómo vivir y tratar con estas dudas.

Lo que sucede es que uno empieza a conocerse a sí mismo, y se vuelve más seguro, mientras más éxitos tienes, más oportunidades tomas.

Tu no dejes que los fracasos y los tropiezos te definan, todos se tropiezan, hoy, mañana y pasado, y algunos se caen muchísimas veces.

Cuando Yo, Michelle Obama, me doy cuenta que podemos tener una larga vida y desarrollar lo que se supone que debemos hacer, ¿a quién le importan los errores que cometí a los 13 años? 

9. Solo continúa trabajando y pon todo tu esfuerzo en ello. 

Ten confianza en ti mismo, porque muchas veces tendrás que sacudirte las etiquetas que otras personas te cuelgan, tendrás que demostrar quién eres.

Tienes que saber quién eres, y si tienes buenos modos, buen carácter y buenas intenciones, eso será lo que te podrá hacer brillar tu Marca Personal.

10. Ten esperanza y no la sueltes. 

Cuando estás esforzándote mucho y empiezas a pensar en abandonar la lucha, quiero que recuerdes algo de lo que Barack y Yo (Michelle Obama) hemos hablado desde que empezamos con este reto, algo que nos ha llevado y sostenido en cada momento antes y después de llegar a la casa blanca, y ese es ‘El poder de la esperanza’, de la fe, la creencia de que algo mejor siempre es posible si estás dispuesto a trabajar y luchar por ello.

Lo que nos ha permitido levantarnos por encima de las dudas y divisiones, de la ira y el miedo es esa fuerte creencia en ‘El poder de la esperanza’.

Tenemos esperanza de que si trabajamos lo suficiente y creemos en nosotros, entonces podremos ser cualquier cosa que soñemos, a pesar de las limitaciones que otros nos cuelguen.

La esperanza de que cuando la gente vea quienes somos en realidad, quizá y solo quizá también se inspirarán para levantarse y lograr ser las mejores personas que puedan.

No tengas miedo, mejor concéntrate, ten determinación, ten esperanza, empodérate con una buena educación, y utiliza esa educación para construir algo que valga la pena.

Michelle Obama.

Fuente: Blog Miss Política