A partir de un estudio realizado a fines de 2010 por una consultora se determinó el uso que los políticos y sus equipos le dan a las herramientas online. En el análisis de cada aplicación se destacan aquellos políticos que mejor posicionados se encuentran y los que, a su parecer, las utilizan de forma más eficiente.
POLÍTICOS EN LA ERA 2.0
Por: Alejandra Lazo
La consultora especializada en e-marketing y comunicación política 2.0, Politegia, dio a conocer un un estudio realizado entre el 15 y el 28 de diciembre del 2010 con el objetivo de analizar el uso actual que le dan los 21 candidatos considerados a la web y el grado de integración de las nuevas herramientas 2.0.
Los políticos seleccionados para el informe fueron aquellos que presentaron candidaturas para el 2011 o han sido considerados por la opinión pública y los medios de comunicación como competidores en las próximas elecciones de la Argentina.
Estos políticos son: Ricardo Alfonsín, Amado Boudou, Hermes Binner, Elisa Carrió, Julio Cobos, Mario Das Neves, Francisco de Narváez, Eduardo Duhalde, Cristina Fernández de Kirchner, Daniel Filmus, Luis Juez, Carlos Heller, Mauricio Macri, Carlos Reutemann, Martín Sabbatella, Ernesto Sanz, Daniel Scioli, Felipe Solá, Fernando “Pino” Solanas, Margarita Stolbizer y Jorge Telerman.
Cada uno de los 21 candidatos presenta algún tipo de presencia web, ya sea a través de un canal propio o en calidad de redes sociales y plataformas 2.0. Si bien dentro de este espectro cabría analizar millones de herramientas diversas, decidieron considerar aquellas que poseen mayor difusión en Argentina.
El 86% de los candidatos posee su sitio web, en donde mayormente, difunde eventos y actos políticos, su historia personal y su propuesta. En estas páginas se puede observar una notable tendencia a incorporar elementos multimedia, que abarca el uso de audios, videos y fotos, y por sobre todo, de integración de redes sociales.
El 59% de estas páginas establecen vínculos directos con Twitter, Facebook, YouTube y Flickr a través de links o mediante aplicaciones que permiten su inclusión en el sitio. A tal punto que, en algunas, ocupan casi la totalidad de la página de inicio.
Dentro del 41% restante, el 29% de ellos, si bien les brinda un espacio, es secundario y disperso por las diversas páginas, y tan solo un 12% no efectúa referencia alguna.
El otro 14% que no posee una página personal, cubre el vacío con un blog, sumando algunos otros que lo usan como espacio complementario, constituyen un 19% que implementa esta herramienta.
Por otra parte, el uso de Twitter se ha generalizado en los últimos años en nuestro país y, actualmente, el 90% de los candidatos tienen implementado Twitter dentro de su estrategia de comunicación web. Sin embargo, no todos le otorgan la misma dedicación.
Entre los candidatos con mayor cantidad de seguidores se encuentran Cristina Fernández de Kirchner con 249.020; Mauricio Macri, con 124.064; y Francisco de Narváez, con 57.258 seguidores.
En cuanto a la cantidad de tweets emitidos, se encontró una notable mayoría de candidatos que no superan los dos tweets por día en promedio; siendo Francisco de Narváez y Felipe Solá los que tweetean con más frecuencia, 3,46 y 2,93 tweets, respectivamente. No obstante, los 21 gozan de una gran base de followers (ninguno inferior a 3.000), que parece no ser proporcional a la cantidad de tweets publicados.
Para investigar un poco más sobre el uso que se le da a esta aplicación, la consultora decidió considerar el tipo de contenido que comunican por Twitter agrupándolo en diversas categorías: Cuestiones Personales, Interacción con seguidores, Eventos y Actividades, Opinión, Anuncios y Difusión de Noticias o Artículos (de medios propios o ajenos).
Este análisis evidencia una clara tendencia hacía la comunicación de Eventos y Actividades, la publicación de Opiniones y la circulación de Anuncios; mientras que la Interacción con los seguidores y la difusión de Cuestiones Personales es relegada por muchos candidatos; siendo Felipe Solá, Jorge Telerman, Julio Cobos y Luis Juez, quienes se destacan en la categoría de Interacción.
Yendo a Facebook, la totalidad de los candidatos concentra sus publicaciones en la difusión de Eventos y Actividades, Opiniones, Anuncios y Noticias y Artículos. En cambio, en lo que respecta a las Cuestiones Personales y la Interacción con sus seguidores, la actividad es casi nula.
Los únicos candidatos que mostraron, sin ser el foco de su estrategia comunicativa, un mínimo interés en profundizar en este tipo de contenidos fueron: Mario Das Neves, Mauricio Macri y Felipe Solá referido a cuestiones personales, y Daniel Filmus, Martín Sabbatella, Felipe Solá y Jorge Telerman, en cuanto a interacción con los usuarios.
Como conclusiones del estudio se afirma que “en las campañas políticas modernas ya no alcanza con tener un sitio web. Este debe estar bien posicionado en los principales motores de búsqueda y tener una implementación completa que cohesione el uso de las nuevas tecnologías y las plataformas 2.0, que por su viralidad, son espacios ideales para acelerar la identificación e interacción con el ciudadano”.
Y agregan: “En tiempos donde la penetración de Internet es cada día mayor y el rechazo por la militancia real y la movilización política, exceptuando algunos casos puntuales, es cada vez más grande, la web, si sabemos aprovecharla, nos acerca un mundo de posibilidades que ninguna otra herramienta brinda a las campañas políticas. En este sentido, un análisis válido, que seguramente será materia de un futuro informe, es el de saber qué políticos llevan a cabo acciones o implementan herramientas de cibermilitancia. Por lo observado, parecen ser pocos aquellos que han tomado la iniciativa en esta área, tan vital y estratégica para las campañas políticas actuales, tal como quedara demostrado luego del modelo Obama 2.0 en los Estados Unidos”.
Asimismo, afirman que se “se evidencia una clara tendencia a favorecer plataformas como Twitter y Facebook, que cuentan con una mayor tasa de uso, y a subestimar otras como Flickr y YouTube, como instrumentos válidos a la hora de complementar los contenidos en la campaña. Incluso en aquellas redes utilizadas con frecuencia por los candidatos, la estrategia comunicativa empleada no permite aprovechar en su totalidad las posibilidades que estas tecnologías aportan.
Muchos de los beneficios de los nuevos medios son ignorados, especialmente aquellos relacionados con la apertura comunicativa de los candidatos, los contenidos que difunden y la actitud que mantienen frente a la interacción con los ciudadanos”.
A lo que añaden: “Están aplicando conceptos mediáticos tradicionales en redes y plataformas que poseen por definición una dinámica diferente. Las emplean como agentes de publicidad para atraer tráfico a sus páginas y como diarios personales en los que van publicando sus opiniones, las actividades en las que participan y compartiendo links de su agrado. Pero están olvidando un aspecto primordial. No se están involucrando con las personas que comentan en sus muros y/o perfiles, no retweetean sus contenidos, no envían mensajes directos y dejan preguntas sin responder”.
Por último sostienen: “La comunicación y participación que permiten las nuevas tecnologías acercan al ciudadano al candidato, lo integran y lo convierten en parte fundamental de la campaña, en un actor más involucrado en el cambio. Pero, frente a la implementación otorgada actualmente en nuestro país, falta profundizar dicha bidireccionalidad para que la verdadera capacidad de estas tecnologías sea correctamente explotada”.
Fuente: ADN Ciudad