Marketing Social, Deportivo y Educativo
En el sector de los servicios sociales campea el marketing social, en la medida que se encarga de las relaciones entre los públicos sujetos de cambios sociales y las agencias o instituciones encargadas de ello. El marketing social está encaminado al manejo de las campañas sociales; entendiéndose por estas, las que conducen a cambios de conducta, actitudes o valores en la población o grupos sociales en general, cambios que se aprecian como positivos para la convivencia humana o el mejoramiento del nivel de vida. Aquí estamos cercanos a las campañas de prevención, de motivación, de información, de actitud, de persuasión acerca de, o para la utilización de algún servicio o producto que lleve a una valoración social positiva.
Se entiende también como marketing social, la gestión de las causas sociales, que si bien nacen como ideas de pequeños grupos sociales, como ‘cruzadas’, su propaganda logra convertirlas en causa popular, que se hace necesario administrar y para luego terminar en una configuración burocrática, como un programa social permanente.
La clave en el marketing social es la medición del impacto del cambio en la conducta social de los grupos seleccionados, y en esto diferente del marketing de los servicios de salud, ya que si bien la salud es uno de los servicios sociales, su prestación está regida más por las herramientas del marketing de los servicios y por la gerencia del servicio, como un enfoque integrado de gestión estratégica, calidad y marketing.
Mención rápida le debemos al deporte y la educación. El deporte tiene manifestaciones mercadológicas importantes que han sido tratadas de manera muy exquisita, en cuanto a los patrocinios y manejo de eventos y certámenes, en donde circulan inmensas sumas de dinero.
En cuanto al marketing educativo, basta para demostrar su existencia, observar lo positivo que la gestión educativa, más que la tendencia, a través del trato directo de las responsabilidades de la educación y sus organizaciones en cabeza de los directamente interesados en el asunto: profesores, padres de familia, alumnos y comunidad. Y aunque los propietarios de los establecimientos privados de educación superior, aceptan de manera tangencial sus técnicas, el marketing urge en ellas, ya que en la mayoría de las veces se convierte en una herramienta positiva de mantenimiento de los usuarios y de mejoramiento de la calidad en las instituciones públicas, que suelen prestar el servicio con desdén e indiferencia por aquello de la tendencia a la gratuidad.
Fuente: Gerencia Pública y Marketing