Por Daniel Eskibel
Todos están en sus marcas esperando la señal de largada.
Allá adelante está la meta.
Tensión. Expectativa.
Cualquiera puede imaginarse la largada, la carrera, el embalaje final y la llegada a la meta con la cabeza hacia adelante para ganar aunque sea por un pelito.
Pero no.
No. Que no. Nones.
Porque uno de los corredores ganó antes de que sonara la señal de largada.
¿Cómo se puede ganar una carrera antes de comenzada la misma?
Ganarla lealmente, dentro de lo legal, sin trampas. Ganarla de verdad. Pero ganarla mientras los demás todavía esperan la señal de largada.
Pues se puede ganar preparándose mucho mejor que los demás. Desde mucho tiempo antes. Invirtiendo tiempo y dinero. Sacrificando muchas cosas deseables.
No es solamente teoría. Lo sé en la práctica. Hace unos cuantos años fui parte de un equipo multidisciplinario que seleccionó y preparó jovencitos para llegar a ser deportistas de élite. Uno de aquellos muchachos con quienes trabajé en los aspectos psicológicos llegó poco tiempo después a campeón mundial de su especialidad.
Campeón mundial.
Sí.
Y sé de su sacrificio. Me consta.
¿También se puede ganar una elección antes de la campaña electoral?
Sí. También.
Digo más: la mayoría de los resultados electorales se definen antes de la campaña electoral.
Antes. Previamente. Before. Meses y años antes de la señal de largada de las elecciones.
¿Cómo se gana?
Del mismo modo: preparándose mejor que todos los demás.
Invirtiendo tiempo y dinero. Organizando. Definiendo un plan estratégico. Aprendiendo. Capacitándose. Formando cuadros políticos. Construyendo equipos. Creando imagen de marca del partido y del candidato. Leyendo buenos libros. Asistiendo a cursos. Creando redes y sistemas de comunicación. Creando infraestructura.
Muchos deciden volcar sus mejores esfuerzos en la recta final de la campaña.
Error. Grave error.
En ese momento ya casi todos los votantes saben a quién van a votar.
El juego es antes. Mucho antes.
Ahora mismo. Mientras estás esperando que llegue la próxima elección…¿qué estará haciendo tu principal competidor?
Fuente: Psicociudad.com