Por: María Vázquez Lorca
La denominada campaña permanente en política y comunicación, ha obligado a que los políticos tengan una vida privada a la altura de lo que sus ciudadanos esperan. Por lo que vemos agradable la imagen del padre de familia entrañable y protector. Podríamos preguntarnos, si cuida de su familia, ¿cómo no va a cuidar de su país?. Una visión tremendamente paternalista de la política que, aunque parece difícil de creer, ha dificultado muchas veces el acceso a mujeres y hombres solteros y divorciados, a algún cargo político y público.
Generar empatía con la sociedad es una estrategia necesaria para un candidato político. Si un líder representa valores que otros desean seguir, le costará menos dirigir a su país en el sentido de percepción de liderazgo. Para la gran parte de la sociedad, la familia representa la base de los valores, y el que la sociedad comparta con el candidato dichos valores genera una conexión que una propuesta o un programa de gobierno no puede dar. Crea una identificación con el candidato. Muéstrame cómo es tu familia, cómo es tu vida y tus ideales, y te daré mi confianza.
![JFK walking with daughter](http://mpolitico.com/wp-content/uploads/2014/04/JFK-walking-with-daughter.jpg)
Sobre los distintos valores de vida, son la mejor alternativa para formar la personalidad del ser humano, porque sus elementos están en nuestra naturaleza interna. Una serie de valores y actitudes que se muestran como un elemento más de la estrategia de comunicación de la campaña permanente o de la campaña electoral. Se trata de la política mediatizada con imágenes, sobre todo, de corte familiar. Una buena imagen o vídeo de un político rodeado de los suyos. Es un hombre de familia. Un modelo a seguir del que todas las sociedades, en menor o mayor medida de aquí y allá, quieren ver en la presidencia o alcaldías de sus países. Un modelo de conducta que enamore a los ciudadanos. Les inspire.
Fuente: Blog Maria Vázquez