La publicidad exterior es, entre muchas opciones de comunicación masiva, una de las más eficaces cuando se trata de ofrecer productos o servicios en materia electoral o realizar interacción o rendición de cuentas en época de gobierno; sin embargo no siempre es efectiva, teniendo en cuenta el alto costo comercial, el logro de una ubicación adecuada según las autoridades o propiedad o la consolidación de un mensaje transmita la experiencia de campaña o gobierno que se quiera ofrecer a los usuarios.
A partir de ciertas vallas que parecen diseñadas desde el ego y la carencia de un verdadero criterio, quiero compartir con ustedes algunas condiciones que debe tener una valla en busca de lograr su objetivo de comunicación-persuaciòn masiva.
- Debe ser consumida por el peatón o el ocupante de un vehículo en 7 segundos. Más de ese tiempo es tontería e incluso el mensaje central debe coparse en 3 segundos.
- Una buena valla emplea solo 3 mensajes fuerza y 2 más complementarios como orientación para ampliar.
- La fotografía o el gráfico sigue siendo el ancla principal de una buena valla.
- El inútil, esnobista y pasado de moda poner redes sociales o páginas web en las vallas. No hay consumo, no hay tiempo de anotar, no hay forma de apertura directa.
- Los códigos QR pueden ser una buena opción para las vallas de consumo peatonal en sitios seguros.
- Más de 10 palabras en total, dentro de una valla, son desperdicio.
- Los fondos claros son más exitosos en las vallas físicas y los oscuros en las vallas virtuales.
- Los videos en vallas virtuales no pueden durar más de 5 segundos por ciclo.
- Una valla, como un volante o plegable puede ser útil y eso lo valora el usuario.
- La valla-video que está encendida todo el tiempo se convierte en paisaje y ya nadie le interesa.
- La vida útil de un diseño de valla son máximo 3 semanas. Luego de eso hay un consumo mecánico y con su deterioro se podría generar descrédito.
- Las vallas con audio contaminan y no son funcionales en entornos urbanos, ni siquiera en sistemas de pantalla en lugares amplios.
- La valla es una pieza que se complementa con los demás recursos, debe ser memorable, clara y emocionalmente rica.
- Nunca utilice dibujos, abstracciones o trazos artísticos que hagan complejo el consumo o se presten para interpretaciones equivocadas.
Fuente: Blog de Miguel Jaramillo Luján