Por Daniela Aruj
Hace un año tomé un curso en Singularity, la Universidad del Silicon Valley, y escuché una frase que me impacto ” la mejor forma de predecir el futuro es crearlo”, hoy me impacta doblemente porque nos enfrentamos a un futuro y un presente muy diferente al esperado, no estamos preparados para estos tiempos complejos, no hay antecedentes, ni referencias ni caminos a seguir. No tenemos manual de procedimientos y esto nos inquieta.
Por ello y analizando lo que veo en mi organización y en las de mis clientes es que me gustaría dejarles algunos interrogantes:
- ¿Qué tipo de líder estoy siendo? Si algo nos enseñó la pandemia es que compartimos tiempos de carencias, de escasez y que la empatía es una forma de vida que llegó para quedarse.
- Hoy se demandan liderazgos más humanos. ¿Te estás dando permiso para ejercerlo? Está permitido mostrarse vulnerable sin que eso signifique perder autoridad y también hay espacio para el miedo, la angustia, la inseguridad. Si es así, hay que tener como meta que no te paralice, que no te inmovilice porque el rol fundamental Del líder es tomar decisiones y hacerlo en este presente complejo implica mayor compromiso, se requiere mucha fortaleza y coraje.
- ¿Sabes cómo están conformados tus equipos? Yo encuentro tres grandes grupos: los que se aferran al pasado y creen que una vez que esto termine volveremos a ser como antes; los que aun creyendo lo mismo que los anteriores se animan incorporar conductas y herramientas nuevas y por último los que ya transitan el futuro y saben que nada será lo mismo, ni siquiera nosotros.
- Teniendo en cuenta la conformación de tus equipos, ¿Qué modelo de motivación organizacional estás utilizando? Si ya incorporamos en comunicación el camino del uno a uno, ¿Por qué no intentarlo en motivación? Cada persona como individuo que es requiere mecanismos motivacionales diferentes y demás está decir que alguien que se siente parte de una organización contribuye en mayor cuantía y con más convencimiento al logro del objetivo colectivo.
- Como no volveremos a ser los que éramos aparecen diferentes caminos y oportunidades de construir nuevos futuros, de adaptarnos al cambio para generar verdaderas transformaciones. ¿Cuánto tiempo le estás dedicando a tomar esas oportunidades, a detectarlas e ir por ellas? ¿Te lo estás permitiendo? Hoy se requieren líderes con inteligencia emocional, más humanos, más flexibles, más transparentes para generar nuevos contratos sociales.
Los invito pensarse y repensarse, estar abiertos a las oportunidades y en definitiva, como líderes empujar en pos del desarrollo colectivo.