Por: Dionisio Solórzano
Existen candidatos que subestiman la importancia del consultor o asesor comunicacional en las campañas electorales. Existen aspirantes que determinan en el accionar de sus pasos que los consejos de estos profesionales son banales y totalmente prescindibles, otros pretenden contratar a los expertos en los temas de imagen para escucharlos y acatar solamente aquellas recomendaciones de juzgan positivas, sin interesarle los argumentos que el profesional esboce sobre las ideas descartadas.
Los consultores políticos son importantes aliados, son voces que claman en el desierto enseñando el camino por donde debe transitar la campaña.
Son magos de las comunicaciones y personas que pueden hacer que su personalidad, propuestas e ideas sean más apetecibles a la opinión pública, por ende, son los asesores piezas fundamentales en el ajedrez de los procesos comiciales. Releyendo el portal web del compatriota y reconocido asesor de campañas, J.J. Rendón, nos encontramos con una lista de recomendaciones para utilizar a un consultor político, extraído de la visión del experimentado Joseph Napolitan, algunas de ellas son:
- El consultor político no debe ser considerado una amenaza.
- Busque un consultor político lo más pronto posible. No espere a que sea demasiado tarde para contratar un consultor que lo ayude en su campaña.
- Proporcione a su consultor político las herramientas que él necesite.
- Aproveche la experiencia de su consultor político.
- Escuche al consultor.
- Hable con su consultor antes de tomar una decisión importante.
Sin lugar a dudas estás aseveraciones, y muchas más que se quedan en el tintero debido a la carencia de espacio para enumerarlas todas, son consejos indispensables para convertir al consultor político en una herramienta útil, pero sobre todo muy eficaz.
Los consultores de imagen son necesarios para alcanzar el objetivo electoral. Cada día el marketing político domina la escena de nuestras sociedades, cada día los electores se vuelven menos racionales para convertirse en objetivos vulnerables para las estrategias de comunicaciones gracias a la emotividad que mueve su comportamiento.
El conocer cómo llegar a la mayor cantidad de públicos metas en el menor tiempo y con mayor impacto posible marca la esencia y la línea entre vencer o no en un proceso electoral.
Si el candidato no comprende que cada vez que se agudizan las campañas el saber ¿qué decir?, ¿cómo decirlo? ¿Y a través de qué canales decirlo? se tornan elementos indispensable para conocer cuál es el camino hacia la victoria electoral.
Si el candidato desestima la labor del consultor político este “no puede obrar milagros” como ya Napolitan lo aseveraba, entonces el primer paso que debe tener un asesorado es el de escuchar y dejarse asesorar.
Aprovecho las últimas líneas de este artículo para enviarle mis palabras de respeto a quien se ha convertido en el hacedor de Presidentes en América Latina, J.J. Rendón, un venezolano que se destaca como el más célebre de los asesores políticos y comunicacionales del momento. Enhorabuena.
Fuente: Blog – Desde Alta Mar